Diferencias entre un lunar y un melanoma

En el cuerpo de un adulto, podemos encontrar más de 20 manchas pigmentadas o lo que se conoce como lunares. Algunos de ellos, estaban presentes desde el nacimiento, mientras que otros, se desarrollaron a lo largo de los años. Sin embargo, este tipo de manchas suelen confundirse con la aparición de un melanoma, ya que, las características suelen ser prácticamente similares. Para evitar más complicaciones, te daremos a conocer las diferencias entre un lunar y un melanoma. Sin duda alguna, esta información te resultará bastante sorprendente.

Como bien sabemos, los lunares o manchas pigmentadas, suelen aparecer por distintas razones: factores hereditarios, el embarazo, cambios hormonales, o la fuerte exposición al sol. Además, la cantidad de cada uno de estos puede variar según el estilo de vida que lleve la persona.

Características del melanoma

A diferencia de los lunares, el melanoma es un tipo de cáncer de piel, el cual aparece voluntariamente o sobre un lunar modificado. Las manchas pigmentadas, suelen ser claramente simétricas, con una forma redonda, y posee un color marrón homogéneo encontrado en un diámetro menor a 5 milímetros. El melanoma, tiene la característica de ser una mancha totalmente asimétrica, con bordes festoneados e irregulares, y pueden llegar a poseer más de dos colores (rojo, marrón o negro).

Las personas con mayor probabilidad de padecer melanoma, son aquellas que poseen un antecedente familiar claro, el cual puede llegar a ser hereditario. Así mismo, las personas que contienen grandes cantidades de lunares en el cuerpo, y son de ojos y piel claros, son más propensos a sufrir de melanoma.

Es importante saber que, para evitar por completo este tipo de irregularidad, te recomendamos hacer uso de protectores solares, así como también productos hidratantes y nutritivos. Así mismo, es recomendable que las actividades al aire libre no sean tan prolongadas.